El director del programa Gross Global Happiness en la Universidad para la Paz de las Naciones Unidas, Luis Gallardo, fue conferencista en el evento “Educando para la Felicidad” desarrollado en el Colegio Lourdes de Piura, previo a eso mantuvo una charla con este portal.
Señala que la mayor pandemia en el mundo ya no es el covid, sino la soledad. “La soledad tiene el mismo efecto nocivo que fumar 15 cigarrillos diarios. Está provocando la falta de esperanza. Yo vivo en Estados Unidos y una de cada cuatro personas dice que no tiene ningún amigo”, indica.
Precisa que una de las últimas encuestas señala que el 50% de los niños -en ese país- no tiene esperanza de futuro, y que el 30% de los niños está pensando en suicidarse.
Las 300 emociones
“Un espacio estigmatizado por las sociedades es la salud mental. ¿Qué pasa cuando tengo ansiedad, o me siento solo y me siento triste de una forma crónica, o no tengo motivación para ir al colegio? Todo esto está dentro de la salud mental y no tenemos ninguna educación a nivel socio emocional para entender ni nombrar más de cinco emociones”, explica Gallardo.
Asegura que existen más de 300 emociones definidas. “Tenemos una falta de educación a nivel emocional, socioemocional y ético en muchas casas. Desde la Fundación Mundial de la Felicidad estamos intentando llevar esa información al mundo entero a nivel de colegios, a nivel de empresas, y a nivel de gobiernos y líderes. Es muy importante que los maestros o los directivos que pueden influenciar sobre otras personas, logren manejar sus emociones. Por eso es tan importante esa educación socio emocional, es importante gestionar y entender por qué la subjetividad basada en la percepción es tan complicada”, detalla.
Redefinir el éxito
Respecto de aquellas cosas que nos hacen infelices, Gallardo señaló tres: quejarnos, compararnos y competir. Sin embargo, vivimos en un mundo donde hacemos aquellas tres cosas, convirtiéndose en barreras.
Gallardo, premio Nobel de la Paz de Asia 2022, plantea que se debe redefinir el éxito. “Estamos forzados a lograr el éxito. A nivel cultural definen el éxito la fama, el poder y el dinero; pero el éxito es ser más feliz, es tener una vida calmada en armonía y equilibrio, o disfrutar de nuestros hijos y familia”, señala Gallardo al tiempo de afirmar que la felicidad es una percepción subjetiva y, por lo tanto, individual.
“Tenemos muchos estudios que demuestran que la gente feliz de partida tiene más éxito: innova más, crea más, crea un entorno mucho más positivo a su alrededor. La gente feliz no mata, no destruye”, afirma convencido.
Luis Gallardo, también presidente de la Fundación Mundial para la Felicidad, explica la importancia de la educación. “Hablamos de educación a los profesores y los padres, para que dejen tranquilos a los hijos, les dejen crecer en armonía y equilibrio, que jueguen y descubran su propósito: qué es lo que quieren hacer en la vida, pero no para tener más cosas, sino para ser. Si el objetivo fundamental del ser humano es ser feliz, tenemos que orientar lo que hacemos en la vida para que nos haga felices”, remarca.

Entender quién soy
La felicidad está relacionada al ser de la persona, afirma Gallardo. “Lo que hay que entender es quién soy, eso se logra mediante un proceso de descubrimiento de cuál es mi esencia, de qué me hace único, de porqué sonrío. La exploración de nuestras emociones, de nuestra luz y esencia requiere silencio. El proceso de autodescubrimiento es el más importante que tiene el ser humano en su vida, pero le dedicamos muy poco tiempo porque vivimos en piloto automático. Hay personas que al final del día, llegan a casa y no saben para qué han hecho lo que han hecho durante ese día”, explica.
El conferencista detalló cuatro claves para ser felices: apreciar, agradecer, estar al servicio de los demás, y tener relaciones con profundidad.
Remarca que es importante tener un amigo cuando menos, no es necesario tener un grupo de amigos.
Deja en claro que la felicidad no viene de fuera, no viene de la pareja que se elige para tener hijos, del trabajo, del chocolate que alguien consume, o de aquel lugar con mucha naturaleza que se visita. Gallardo afirma que todo lo anterior son activadores de la felicidad, es decir que nos pueden ayudar a tener felicidad en determinado momento.
Gallardo refiere que la exploración personal es necesaria. “Por ejemplo, debo saber por qué me siento vacío. Entenderlo. Tal vez es por un trauma, por una herencia ancestral, porque no se quién soy, no sé qué hago en el mundo, o porque no he explorado para qué existo”, indica.
Educación para sobrevivir
Luis Gallardo afirma que, en este momento los colegios educan para que los niños hallen un trabajo, para que compitan o ingresen a la universidad, es decir, que hemos creado un sistema educativo para que los niños puedan sobrevivir en este mundo, pero no para que sean felices.
“La educación para la felicidad está basada en los pilares fundamentales de cómo se crea la felicidad, que es el nivel social (tener amigos, tener relaciones), el nivel espiritual (conectar con uno mismo y su esencia), la gestión de las emociones, a nivel intelectual que es desarrollar un pensamiento crítico, una salud física o de movimiento, todo eso se tiene que centrar en el sistema y las asignaturas a educar para la felicidad”, explica Gallardo.
Señala que, para sobrevivir en este mundo, es necesario tener el afecto, el cariño y el apoyo de los demás. “Vivimos en un mundo en que la gente ya debe darse cuenta que, o sobrevivimos todos, o no sobrevive nadie”, remarca.
Por último, el conferencista aconseja no apagar la felicidad de los niños. “Los niños nacen absolutamente felices y, si no les apagáramos la felicidad, iluminarían la humanidad. Eso es lo que le pedimos a los profesores y a los padres que nos visitan constantemente, les pedimos que ellos se formen para que ellos sean felices, porque así también van a dejar ser felices a los niños”, sostiene.
A continuación, te compartimos el audio de la entrevista completa a Luis Gallardo, contiene algunos datos que no hemos reproducido en el texto anterior.